“Él no creó al hombre para ser mujer, creó al hombre para ser hombre… No creó a la mujer para ser hombre, creó a la mujer para ser mujer, y esta es la verdad”, dijo con gran valentía el pastor.

Acto seguido, un hombre con peluca, zapatos altos y vestido de mujer se aproximó al pastor apuntándolo con una pistola y con actitud amenazante, debido a que fue confrontado por el mensaje expuesto.

“Debería”, le dijo el hombre en cuestión al pastor, a quien apuntó a pocos centímetros del rostro, dando a entender que debido a su predicación él debía asesinarlo, ya que es evidente la verdad fue un golpe duro para él.

Con coraje y valentía y sin reacciones de miedo o temor, el pastor Kihara le respondió con una actitud que desafía la fe de todos, pues a pesar de intención violenta, él decidió no actuar igual.

“Oye, amigo, tú decides si quieres hacerme eso. Que Dios te bendiga”. E incluso después de enfrentarse a la muerte. Aunque te sigo queriendo. Aunque me apuntaras con un arma, te sigo queriendo, te sigo queriendo”, expresó Kihara.

Cuando los cristianos defienden la verdad de la Palabra de Dios sobre temas como la sexualidad, el género y la identidad, a menudo enfrentan resistencia y, en algunos casos, violencia, especialmente en interacciones con la comunidad LGBT.

Estas confrontaciones reflejan la tensión entre valores opuestos y la percepción de que la verdad en Dios puede ser percibida como ofensiva. Jesús mismo advirtió sobre el odio del mundo hacia sus seguidores, estableciendo que esta oposición es parte de su camino.

La comunidad cristiana está llamada a perseverar en la proclamación del evangelio, incluso ante la oposición violenta. Este hecho vivido por el pastor Kevin Kihara es un ejemplo poderoso de coraje y gracia en medio de situaciones hostiles.






Fuente(Bibliatodo Noticias)